Las contraseñas son la llave de acceso a nuestras cuentas online, desde el correo electrónico hasta las redes sociales, pasando por los servicios de banca, compras o entretenimiento. Sin embargo, muchas personas no le dan la importancia que merecen y usan contraseñas débiles, predecibles o repetidas, lo que facilita el trabajo de los hackers que quieren robar sus datos personales o financieros.
Las contraseñas más hackeadas del mundo y cómo generar una segura en segundos
Cada año, se publica un ranking de las contraseñas más hackeadas del mundo, basado en los datos filtrados por los ciberdelincuentes. El último informe, elaborado por la empresa de seguridad NordPass, revela que las contraseñas más usadas y más vulnerables son las siguientes:
– 123456
– 123456789
– picture1
– password
– 12345678
– 111111
– 123123
– 12345
– 1234567890
– senha
Estas contraseñas son tan fáciles de adivinar que un hacker podría acceder a una cuenta en menos de un segundo, según NordPass. Además, muchas de ellas están en la lista negra de algunos servicios online, que no permiten usarlas por ser demasiado inseguras.
¿Cómo crear una contraseña segura?
Para evitar que nuestros datos caigan en manos de los hackers, es necesario crear contraseñas seguras, que cumplan con los siguientes requisitos:
– Ser largas: al menos 12 caracteres, aunque cuanto más mejor.
– Ser complejas: combinar letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos especiales.
– Ser únicas: no usar la misma contraseña para varias cuentas, ni basarla en datos personales como el nombre, la fecha de nacimiento o el número de teléfono.
– Ser aleatorias: evitar usar palabras comunes o secuencias lógicas, y optar por combinaciones sin sentido o frases memorables.
– Ser cambiadas: renovar las contraseñas periódicamente, al menos cada seis meses, y no reutilizar las antiguas.
¿Cómo recordar las contraseñas seguras?
Crear contraseñas seguras puede ser un reto, pero recordarlas puede ser aún más difícil. Para facilitar esta tarea, existen algunas herramientas que nos pueden ayudar:
– Los gestores de contraseñas: son aplicaciones que almacenan y generan contraseñas seguras para cada cuenta, y que se pueden sincronizar con varios dispositivos. Algunos ejemplos son LastPass, Dashlane o 1Password.
– La autenticación de dos factores: es un sistema que añade una capa extra de seguridad al requerir un código o una confirmación adicional para acceder a una cuenta, además de la contraseña. El código puede enviarse por SMS, por correo electrónico o por una aplicación como Google Authenticator o Microsoft Authenticator.
– La biometría: es el uso de características físicas o comportamentales para identificar a una persona, como la huella dactilar, el reconocimiento facial o la voz. Algunos dispositivos y servicios permiten usar estos métodos para desbloquear el acceso sin necesidad de introducir una contraseña.
Con estas medidas, podemos proteger nuestras cuentas online de los ciberataques y evitar ser víctimas de robo de identidad, fraude o extorsión. Recuerda que tu contraseña es tu primera línea de defensa en el mundo digital, así que no la descuides.
Aquí hay cinco titulares optimizados y un nuevo artículo de prensa sobre cuáles son las contraseñas más hackeadas del mundo y cómo hacer una segura:
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