¿Alguna vez te has despertado con un fuerte dolor de cabeza después de una noche de fiesta? Si es así, no estás solo. Muchas personas sufren de lo que se conoce como resaca, un conjunto de síntomas que aparecen al día siguiente de consumir alcohol en exceso. Entre estos síntomas, el más común y molesto es el dolor de cabeza.
Pero, ¿por qué el alcohol provoca dolor de cabeza? ¿Y qué se puede hacer para prevenirlo o aliviarlo? En este artículo te explicamos las causas y los remedios de este problema tan frecuente.
¿Qué causa el dolor de cabeza por alcohol?
El alcohol es una sustancia que tiene varios efectos sobre el organismo, tanto a nivel físico como psicológico. Algunos de estos efectos son los responsables del dolor de cabeza que se siente al día siguiente de beber.
Estos son algunos de los mecanismos que intervienen en la aparición del dolor de cabeza al consumir licor:
– Deshidratación: El alcohol es un diurético, es decir, aumenta la producción y eliminación de orina. Esto hace que se pierda agua y electrolitos, lo que puede provocar deshidratación. La deshidratación reduce el volumen sanguíneo y aumenta la viscosidad de la sangre, lo que dificulta su circulación por los vasos cerebrales y genera dolor.
– Vasodilatación: El alcohol también tiene un efecto vasodilatador, es decir, relaja las paredes de los vasos sanguíneos y aumenta su diámetro. Esto hace que la presión arterial baje y que el flujo sanguíneo sea más irregular. Además, la vasodilatación puede estimular los nervios sensitivos que rodean a los vasos cerebrales y causar inflamación y dolor.
– Inflamación: El alcohol es una sustancia tóxica que el organismo debe metabolizar y eliminar. Para ello, el hígado produce unas enzimas que transforman el alcohol en acetaldehído, una sustancia aún más tóxica y dañina. El acetaldehído se acumula en el cuerpo y provoca una respuesta inflamatoria que afecta a varios órganos y tejidos, incluyendo el cerebro. La inflamación cerebral puede irritar las meninges, las membranas que recubren el cerebro y la médula espinal, y provocar dolor.
– Alteración del sueño: El alcohol también afecta al sueño, tanto a su cantidad como a su calidad. El alcohol puede dificultar el inicio del sueño, interrumpir sus fases y reducir su duración. Además, el alcohol altera el ritmo circadiano, el reloj biológico que regula los ciclos de sueño-vigilia. Un sueño insuficiente o de mala calidad puede provocar fatiga, irritabilidad y dolor de cabeza.
¿Cómo prevenir o aliviar el dolor de cabeza por tomar cerveza o vino?
La mejor forma de prevenir el dolor de cabeza por alcohol es evitar consumirlo o hacerlo con moderación. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se considera un consumo moderado de alcohol el que no supera los 14 gramos al día para las mujeres y los 28 gramos al día para los hombres. Esto equivale a una copa de vino o una lata de cerveza para las mujeres y dos copas de vino o dos latas de cerveza para los hombres.
Sin embargo, si ya has consumido alcohol en exceso y tienes dolor de cabeza, hay algunas medidas que puedes tomar para aliviarlo:
– Bebe agua: El agua te ayudará a rehidratarte y a eliminar el alcohol y sus metabolitos del organismo. Bebe agua antes, durante y después de consumir alcohol, y sigue bebiendo agua al día siguiente hasta que te sientas mejor.
– Come alimentos ligeros: Los alimentos te aportarán energía y nutrientes que pueden ayudarte a recuperarte. Sin embargo, evita comer alimentos grasos o picantes, ya que pueden irritar tu estómago e hígado. Opta por alimentos ligeros como frutas, verduras, sopas o tostadas.
– Toma analgésicos: Los analgésicos pueden aliviar el dolor de cabeza de forma temporal. Sin embargo, ten cuidado con el tipo de analgésico que tomas, ya que algunos pueden ser perjudiciales para tu hígado o estómago si los mezclas con alcohol. Los más seguros son el paracetamol y el ibuprofeno, siempre que los tomes en las dosis recomendadas y no tengas alergia o contraindicaciones.
– Descansa: El descanso te ayudará a recuperar tu energía y a regular tu ritmo circadiano. Intenta dormir al menos 8 horas al día y evita la luz y el ruido que puedan interferir con tu sueño. Si no puedes dormir, al menos trata de relajarte en un ambiente tranquilo y oscuro.
– Evita el alcohol: El alcohol solo empeorará tu situación, ya que aumentará la deshidratación, la inflamación y la alteración del sueño. Además, el alcohol puede provocar lo que se conoce como efecto rebote, es decir, que el dolor de cabeza vuelva a aparecer cuando el efecto del alcohol se pasa. Por lo tanto, evita consumir alcohol hasta que te hayas recuperado por completo.
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