Cuatro jóvenes, dos de ellos conversos al Islam, han sido detenidos por la Policía en una operación contra el terrorismo yihadista en Granada, Barcelona y Madrid. Los arrestados, que se hacían llamar «los hijos del Califa», estaban muy radicalizados y habían conseguido un manual yihadista para fabricar el explosivo TATP, conocido como la «madre de Satán» por su potencia y su inestabilidad.
Según fuentes policiales, los detenidos formaban parte de un grupo cerrado en las redes sociales, administrado por el cabecilla, un individuo residente en Huétor-Tajar (Granada) que se hacía llamar «el Califa».
En ese grupo, los jóvenes compartían propaganda yihadista de gran violencia y se adoctrinaban mutuamente en la ideología radical. También expresaban su deseo de «derramar sangre para recuperar Al Andalus y restaurar el Califato», haciendo referencia a la antigua presencia musulmana en la península ibérica.
Desmantelada una red yihadista que buscaba recuperar Al Andalus con explosivos caseros
La investigación se inició en 2022, cuando la Policía detectó el perfil de «el Califa» y su actividad proselitista. Sin embargo, no fue hasta este año cuando se judicializó el caso, al identificar a otros tres individuos que formaban parte del grupo.
La operación se precipitó cuando los agentes interceptaron una conversación en la que los detenidos comentaban que habían encontrado en la deep web un manual para fabricar el TATP, un explosivo muy utilizado por los terroristas yihadistas por su facilidad de elaboración con productos caseros. El TATP fue el explosivo empleado por los autores de los atentados de París en 2015 y de Bruselas en 2016.
Ante el riesgo de que los detenidos pudieran pasar a la acción, la Policía procedió a su arresto y al registro de sus domicilios, donde se incautaron de ordenadores y teléfonos móviles que están siendo analizados.
Los cuatro han sido acusados de los delitos de auto adoctrinamiento con propósito terrorista, adoctrinamiento a terceros y enaltecimiento del terrorismo. Tres de ellos han sido enviados a prisión provisional, mientras que el último ha quedado en libertad bajo medidas cautelares.
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