Una mujer polaca, Julia Faustyna, de 21 años, ha afirmado en redes sociales ser la niña británica desaparecida Madeleine McCann, quien desapareció de unas vacaciones familiares hace más de una década. Faustyna argumentó que podría ser McCann, debido a su edad y apariencia compartidas. La mujer presentó muestras para tres exámenes forenses diferentes para delinear su secuencia de ADN y una prueba genética para establecer su ascendencia. Sin embargo, los resultados de la prueba de ADN demostraron que no es la misma persona que fue secuestrada en Portugal en 2007.
Aunque Julia Faustyna negó las afirmaciones de sus padres de que robó su propio certificado de nacimiento y fotos de la infancia para ocultar su verdadera identidad, la investigación demostró que ella es absolutamente 100 por ciento de Polonia. Su familia insistió en que son parientes biológicos de la mujer y que era “obvio que Julia no es Maddie”.
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En redes sociales, Faustyna intentó probar su caso al señalar las similitudes físicas entre ella y Madeleine, incluida una mancha marrón en el ojo derecho de cada niña. A pesar de que los resultados de ascendencia y ADN demostraron que no es Madeleine, Faustyna afirmó que todavía no querría tener contacto con su familia polaca.
Los padres de Madeleine McCann no han comentado públicamente sobre las afirmaciones de Julia Faustyna. La policía que investiga la desaparición de Madeleine ha gastado alrededor de $16 millones en la Operación Grange desde 2011, y se espera que reciba $370,000 en nuevos fondos para la investigación de lo que le sucedió a la niña secuestrada, según informes recientes.
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