El juicio oral contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, acusado de fraude procesal y soborno a testigos, fue suspendido este 20 de marzo de 2025 tras una decisión de la Corte Suprema de Justicia. La jueza 44 Penal de Conocimiento, Sandra Liliana Heredia, acató la orden luego de que el alto tribunal aceptara una acción de tutela presentada por la defensa del exmandatario.
¿Por qué se suspendió el juicio?
La defensa de Álvaro Uribe, encabezada por el abogado penalista Jaime Granados, interpuso la acción de tutela argumentando que la jueza Heredia vulneró los derechos fundamentales del expresidente al rechazar una recusación en su contra de manera inmediata y sin análisis de fondo. La Corte Suprema determinó que existió una posible vulneración al debido proceso y ordenó la suspensión del juicio hasta que se resuelva el incidente de recusación.
El papel del Juzgado 45 de Bogotá
Ahora, el Juzgado 45 de Conocimiento de Bogotá tiene un plazo de 48 horas para decidir si la recusación contra la jueza Sandra Liliana Heredia es procedente. Esta decisión determinará si el juicio contra Uribe continúa bajo su dirección o si se asigna un nuevo juez al caso.
Argumentos de la defensa de Uribe
Jaime Granados argumentó que la jueza Heredia ha mostrado parcialidad en el proceso y que ha tomado decisiones que afectan negativamente los derechos del expresidente. Entre las principales razones expuestas en la tutela se encuentran:
- Rechazo inmediato de la recusación sin justificación suficiente.
- Descalificación constante hacia la defensa del exmandatario.
- Negación sistemática de pruebas clave para la defensa.
- Prelación de la celeridad del juicio sobre las garantías procesales.
La defensa también señaló que la jueza favorece a la Fiscalía y que sus decisiones han sido contrarias a los principios del debido proceso.
¿Qué sigue en el caso?
Mientras se resuelve la recusación, el juicio contra Álvaro Uribe queda en pausa. Dependiendo de la decisión del Juzgado 45, el proceso podría continuar con la misma jueza o con un nuevo magistrado a cargo. Esta pausa representa un giro inesperado en el caso judicial más mediático de los últimos años en Colombia.