La polémica estalló tras una visita oficial del ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, al municipio de Puerto Gaitán (Meta), donde profirió insultos contra la gerente del Hospital Departamental. Ante los hechos, la gobernadora del Meta, Rafaela Cortés, alzó la voz en defensa de la funcionaria y pidió respeto a la institucionalidad.
“No se lo vamos a permitir”
Durante una entrevista con La FM de RCN, Cortés fue contundente al rechazar lo ocurrido:
“Al Meta usted no viene a insultar a mujeres y a amenazarlas, no se lo vamos a permitir”, afirmó.
En su cuenta de X (antes Twitter), la mandataria señaló que este tipo de actitudes no pueden seguir siendo comunes en el ejercicio del poder.
“Lo ocurrido es la típica conducta de maltrato de hombres que insultan y agreden a mujeres ‘por su bien’ y luego les llevan obsequios”, expresó.
Ministro Jaramillo @GA_Jaramillo @MinSaludCol: Como mujer y defensora de nuestros derechos, debo elevar mi más enérgica voz de protesta. No tiene ninguna justificación hablarle así a una mujer utilizando su posición de poder; tampoco a intimidarla y menos a desearle que ojalá se…
— Rafaela Gobernadora (@RafaelaCortesZ) April 25, 2025
Graves declaraciones del ministro
Según se conoció, el ministro Jaramillo, en un momento de exaltación, dijo a la gerente:
“Ojalá le tocara a usted y se enfermara aquí y no tuviera familia, h********a, y la mandaran para Villavicencio o Bogotá”*, lo que desató indignación en redes y en el entorno político local.
¿Conflicto de intereses y persecución?
La gobernadora también advirtió sobre posibles represalias institucionales, mencionando que la esposa del ministro ocupa un alto cargo en la Superintendencia Nacional de Salud.
“Ya mandaron una comisión recientemente a Villavicencio, y no queremos que esto se convierta en persecución”, sostuvo.
Cortés explicó que la gerente del hospital quedó emocionalmente afectada y que están evaluando acciones, pero lo más importante ahora es que haya una disculpa pública y un cambio de actitud:
“Yo soy una mujer de carácter, pero también sé pasar la página. El Meta merece respeto, y nuestras mujeres, más”, concluyó.
No es la primera vez
Según la mandataria, este comportamiento del ministro no es nuevo:
“Se ha vuelto costumbre que llegue a los hospitales públicos a regañar. Pero lo de ayer fue muy grave”, indicó.
La controversia ha avivado el debate sobre el trato de altos funcionarios hacia sus subalternos, en especial hacia las mujeres, en un país donde los índices de violencia de género siguen en aumento.
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