Una tragedia se presentó el pasado viernes 15 de septiembre en Bogotá, cuando una colombiana de 23 años que había viajado desde España para hacerse un retoque estético, falleció tras someterse a un mal procedimiento de lipoescultura en un local que funcionaba como clínica de garaje.
La víctima fue identificada como Laura Sofía Amaya Duarte, quien había ahorrado cerca de 7 millones de pesos para pagar por adelantado la cirugía antes de regresar a Europa con su hijo de 4 años.
Según sus familiares y amigos, Amaya Duarte había contactado a Brenda Gissel Celeita Angarita, una supuesta médica esteticista profesional que habría atendido a algunos conocidos de la joven previamente. Sin embargo, al llegar al lugar donde se realizaría el procedimiento, ubicado en la localidad de Antonio Nariño, se dieron cuenta de que las condiciones del sitio no eran las adecuadas para tal cirugía.
Laura Sofía Amaya: la víctima fatal de una cirugía estética en una clínica de garaje
A pesar de las malas condiciones del lugar, Amaya Duarte decidió seguir con la cirugía para no perder el dinero que ya había entregado por adelantado. Sin embargo, durante el proceso, la joven sufrió complicaciones y convulsiones que obligaron a trasladarla a la clínica Olaya, donde llegó con los signos vitales muy bajos.
Los médicos intentaron reanimarla, pero fue imposible. Amaya Duarte murió tres minutos después de ingresar al centro médico. La causa de la muerte fue un paro cardiorrespiratorio provocado por una hemorragia interna.
Por su parte, Celeita Angarita desapareció y borró toda evidencia de su supuesta clínica en las redes sociales e internet. La Policía está tras su pista y la Fiscalía inició una investigación por el delito de homicidio culposo.
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