Los detalles del macabro crimen de Sofía Delgado, la niña de 12 años asesinada en Candelaria, Valle del Cauca, han conmocionado al país. Nuevas revelaciones sobre el caso indican que Brayan Campo, el principal sospechoso y confeso asesino, sometió a la menor a un calvario antes de quitarle la vida.
Según fuentes cercanas a la investigación, Campo habría intentado abusar sexualmente de Sofía y la golpeó brutalmente, dejándola gravemente herida. La niña habría agonizado durante varias horas antes de morir, sufriendo una lenta y dolorosa agonía.
Campo, quien era propietario de una veterinaria, habría llevado a Sofía a su establecimiento, donde la mantuvo cautiva y la torturó. Luego, intentó deshacerse del cuerpo arrojándolo a un cañaduzal, pero regresó días después para asegurarse de que la niña estuviera muerta y tratar de incinerar los restos.
Sofía Delgado: una muerte lenta y dolorosa a manos de su asesino
La autopsia reveló que el cuerpo de Sofía presentaba signos de violencia extrema y que algunos huesos mostraban rastros de quemaduras. Estos hallazgos confirman la crueldad del crimen y la perversidad del asesino.
La confesión de Campo y las pruebas presentadas por la Fiscalía han llevado a un juez a dictar medida de aseguramiento en centro carcelario. El hombre enfrenta cargos por feminicidio agravado, secuestro y ocultamiento de pruebas.
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