Álvaro Prieto, el joven de 18 años natural de Córdoba, perdió la vida al recibir una descarga eléctrica en el acople de dos vagones de un tren en Sevilla. El cuerpo del chico fue hallado por unos periodistas que grababan las vías del tren desde un aparcamiento cercano.
Según medios locales, el cadáver presentaba quemaduras en las manos y un avanzado estado de descomposición, lo que indica que murió el mismo día que desapareció. Los investigadores descartan la hipótesis de un homicidio y esperan los resultados de la autopsia para confirmar las causas del fallecimiento.
Según las fuentes de la investigación, el joven pudo haberse colado en las vías del tren y haberse refugiado en el hueco entre dos vagones, donde hay cables de alta tensión. Al tocarlos, sufrió una fuerte descarga eléctrica que le causó la muerte.
El futbolista Álvaro Prieto perdió la vida al tocar unos cables de alta tensión en un tren varado en Sevilla
El suceso causó una gran conmoción entre los familiares y amigos de Prieto, que llevaban cuatro días buscándolo sin éxito. El joven había salido el pasado jueves por la tarde y no había vuelto a contactar con nadie. Su familia había denunciado su desaparición y había difundido su foto por las redes sociales, pidiendo la colaboración ciudadana.
El hallazgo del cuerpo también generó una gran polémica por la emisión de unas imágenes en las que se veía el cadáver enganchado al tren. La cadena pública TVE -responsable de tal transmisión- pidió disculpas por haber emitido estas imágenes en uno de sus programas matinales, alegando que se trató de un error involuntario.
Cabe reseñar que el vehículo donde fue hallado el cuerpo del futbolista del Córdoba de tercera división de España -estaba varado. El tren no se había movido desde el pasado 24 de agosto.
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